Para todas aquellas personas que trabajan en una organización resulta casi obvio imaginarlas como algo estático y que no sufre cambios, aunque luego resulte ser todo lo contrario, pues nosotros cambiamos junto a ellas. Por ello, el primer paso es situarnos con la definición.
¿Qué entendemos por organizaciones del futuro?
Según Salim Ismail, escritor, ponente en TedTalks y experto en organizaciones y en el potencial que poseen, las organizaciones del futuro o exponenciales (ExO’s) son:
“Estas nuevas estructuras organizativas están aprovechando un nuevo conjunto de externalidades disponibles como big data, comunidad, la multitud o tecnologías de aceleración y, al hacerlo, se están desempeñando 10 veces mejor que sus pares en el mismo espacio. Estamos viendo una transformación en los negocios que no se ha visto en varios cientos de años: el futuro será propiedad de esta nueva generación de Organizaciones Exponenciales”
Ahora que ya estamos situados, vamos a comentar dos artículos que resumen las características principales de este tipo de organizaciones. Por un lado, el artículo de Maite Moreno Bosch “Las 8 características de las organizaciones del futuro” añade nuevas ideas y es que la rapidez con la que las organizaciones se adaptan a la tecnología y a las nuevas tendencias es fundamental.
Para entenderlo mejor, las ExO’s (Organizaciones Exponenciales) u Organizaciones de futuro deben seguir la filosofía o el propósito del MTP o “Massive Transformation Purpose”, o lo que es lo mismo, el objetivo clave y fundamental con el que se define a la empresa. Un ejemplo obtenido del post es:
“ El MTP de Google es “organizar la información del mundo” o el del Boston Children’s Hospital es “hasta que todos los niños estén bien”.
Por otro lado, el artículo de Alberto Garcia H, “Los 14 principios de las organización del futuro” analiza la visión del experto Jacob Morgan como uno de los principales artífices de las teorías sobre las Organizaciones del futuro.
Como se puede observar en la infografía, Jacob Morgan formula 14 directrices que debe poseer una organización del futuro, para poder ir implementándolas poco a poco en nuestros proyectos. Veamos alguna de ellas:
- Colaboradores conectados: tener una buena red tanto de colaboradores como tecnológica para que se puedan mantener al tanto de las demandas de contenido.
- “Quiero trabajar” VS “Necesito trabajar”: cambiar la idea de que uno va a trabajar por una necesidad, en su mayoría económica, a ir a trabajar porque quieres trabajar en esos proyectos que se llevan a cabo, y el aspecto económico, aunque es importante, que no sea la razón principal.
- Capaces de adaptarse ágilmente al cambio: En palabras del autor del post “seguidores tardíos significa fuera del negocio”. Esto nos recuerda al post sobre resiliencia que publicamos hace unos días. Adaptarse al cambio y prever con antelación a la competencia los cambios, en muchos casos, supone la supervivencia o no de la empresa.
- Con más mujeres en puestos de top management: Las teorías las conocemos, el techo de cristal es una realidad que dificulta a muchas mujeres el acceso a puestos de dirección o top management, por ello, es una de las realidades de las organizaciones, la igualdad y equilibrio de plantilla en cualquier puesto de mando.
- De utilidad a prosperidad: La utilidad es importante para la durabilidad de la empresa, pero lo que a día de hoy resulta fundamental es el bienestar del empleado. La prosperidad de la empresa se traduce en salud y bienestar tanto de la propia plantilla como de la red de colaboradores. Un conjunto próspero es un conjunto organizacional de futuro.
Ahora que están bien definidas qué son y cómo serán las organizaciones del futuro, en nuestra mano está aplicar todas estas recomendaciones.
